“A cuerpo de embajador”, Jordi Évole Salvados en La Sexta

Jordi Évole y Logo Salvados La Sexta

(OroyFinanzas.com) – El pasado domingo, Jordi Évole destapó en el capitulo de  “A cuerpo de embajador”, del programa ‘Salvados’ de La Sexta, el malgasto que se realiza en las embajadas españolas. El servicio diplomático español se gastó como ejemplo 330.000 euros en cubertería y mantelería, 115.000 euros en banderas, escudos y mástiles o 6,4 millones de euros para construir una nueva residencia para el embajador en Rabat, tema que justificó en el programa el diplomático Fernando Perpiñá-Robert: “Si está en juego la dignidad del Estado y la imagen de España, el gasto no es excesivo en absoluto ”

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El programa “A cuerpo de embajador” de Salvados investigó la función de las embajadas y el gasto que suponen para España en plena época de recortes. Évole entrevistó a un español evacuado de Libia y no precisamente por la ayuda de la embajada española, sino gracias a la compañía Repsol. Asimísmo habló con un empresario español que no recibió ninguna ayuda por parte de la Embajada española cuando su empresa fue ocupada en Marruecos. Évole también conversó con un constructor español radicado en Senegal que afirmaba que el no se relacionaba con las embajadas, porque se trataba de “gente sin preparación, con dos idiomas y poco más, sin preparación comercial que viven de fiesta en fiesta, en su burbuja, y no conocen ni siquiera el país”.

El ex diplomático Melitón Cardona justificó en el programa ‘A cuerpo de embajador’ los gastos diplomáticos en fiestas que él evaluó en una media de cien anuales y de dos cócteles cada tres días, según Cardona son “indispensables como fuente de información”. Este diplomático señaló que las embajadas potencian un 70% las relaciones comerciales y admitió que el amiguismo y la filiación política eran determinantes en el progreso dentro de la carrera diplomática.

Como contrapunto, Évole visitó la embajada danesa en España para conocer el funcionamiento de una embajada extranjera en España que a su vez integra las representaciones comerciales como una medida de ahorro.

El gasto de 6,4 millones de euros en la residencia del embajador en Marruecos en 2011 y las críticas a la formación y la desidia de los diplomáticos españoles en el extranjero fueron los asuntos que desataron una oleada de indignación en Twitter al término de la emisión del programa “A cuerpo de embajador” el pasado domingo.

Salvados es el programa de televisión más visto en la actualidad los domingos y José Ignacio Wert,  ministro de Educación, Cultura y Deporte, ha criticado duramente a Jordi Évole en un reportaje publicado por la agencia británica de noticias Reuters sobre el éxito de Salvados.

“Hace preguntas trampa, siempre lleva ventaja”, dice Wert, que no oculta su poca simpatía al programa de la Sexta. Wert describe como declinó la invitación a participar en el mismo: “Algunos idiotas a mi alrededor en el departamento de Educación estaban a favor de que apareciera en el programa, pero mi hijo, que es más sensato, me dijo que ni me lo planteara”.

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Marion Mueller
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1 Comentario en "“A cuerpo de embajador”, Jordi Évole Salvados en La Sexta"

  1. No soy diplomática, y nadie de mi familia lo es. Sin embargo sí conozco a gente que lo es y sé bastante bien como funcionan algunas cosas y no todo es como el respetado Jordi Évole nos hizo ver ayer en su programa. Cualquier telespectador totalmente ajeno a la materia después de ver el programa se quedará con el dato del gasto en la residencia del embajador en Rabat, con el gasto en mantelería y con la ineficacia de la diplomacia exterior en un momento de crisis. Sin embargo no todo es así: quizá podrían haber mostrado tambien los apuntalamientos que han tenido que hacer en la embajada española de La Habana, que es uno de los edifIcios más bonitos de la ciudad, que necesita una reforma y de momento no se puede llevar a cabo por falta de presupuesto. También podrían haber mostrado al chico que está en Yuba, Sudán del Sur, que desarrolla sus funciones en algo parecido a una caseta de obra. O podría haber hablado con alguno de tantos que no pertenecen a ninguna saga de diplomáticos, que se han sacado su plaza aprobando una oposición después de años de preparación y estudio, apoyados por un enorme esfuerzo familiar. O de la cantidad de crisis de todo tipo en las que la diplomacia española ha desarrollado su función con diligencia y resolución, y que sería imposible enumerar.
    Por otro lado, en el programa, se permitieron confusiones que en nada favorecían al cuerpo; uno de los entrevistados, el que estaba en Senegal y apareció por videoconferencia, confundió en todo momento a el cuerpo diplomático, perteneciente al ministerio de Asuntos Exteriores, con las oficionas comerciales en los países africanos que eél había habitado, dependiente de Economía.
    No digo que no haya muchos asuntos que necesiten una revisión, que soy la primera que pienso que se necesita, pero lo que no es justo es que se realice un reportaje con una visión tan partidista y tan imparcial.

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