(OroyFinanzas.com) – Breve alivio el conseguido para el dólar por la subida de tipos de ayer, o más bien por el mantenimiento del sesgo alcista en la política monetaria por parte de la FED.
El Departamento del Tesoro también contribuyó a tranquilizar al Mercado evitando la confrontación con China por la gestión de su tipo de cambio externo, lo que no impidió que la administración americana se despachase a gusto con los chinos.
El dólar ha recibido bien los primeros datos de la mañana, que presentaban el crecimiento alemán del primer trimestre por debajo de lo esperado (1.4 % interanual frente al 1.5 % esperado), poniendo en cuestión la fiabilidad de las lecturas tan optimistas obtenidas en la encuesta Ifo, que alcanzaron recientemente sus niveles más altos en quince años.
Ciertamente la sorpresa negativa de la producción industrial de marzo, publicada el martes, pone en tela de juicio tanto optimismo, basado al parecer en las buenas perspectivas de crecimiento global, el entusiasmo por el próximo Mundial de fútbol y el consumo adelantado ante el anuncio de tipos más altos para el IVA en 2007.
No ha sido Alemania la única decepción, ya que Holanda ha quedado también por debajo de lo esperado (2.9 % frente a 3.5 %). En este caso ha sido el consumidor el que ha levantado inesperadamente el pie del acelerador, mostrando lo que se conoce como el “perfil malo” de la economía en la zona euro.
En definitiva, todo ha quedado en una prueba de soporte clave en 1.2705-2695, que no llegó a poner en peligro el siguiente nivel en 1.2660. A media mañana un buen dato de producción industrial en el Reino Unido vino en ayuda de la libra, volviendo a mostrar la falta de apoyo para el billete verde, que empezó a perder terreno con claridad.
El rebote de GBP/USD alcanzaba a mediodía proporciones importantes, con los compradores acosando ya la resistencia en 1.8690-8700, después de una recuperación de más de figura y media durante la mañana. Pero lo mejor estaba por llegar.
Precisamente al día siguiente de que la FED dejase claro –para quienes no lo estuviera ya – que sus siguientes movimientos van a depender de los datos económicos que se vayan conociendo, llega la primera decepción.
Las ventas minoristas del mes de abril crecieron un 0.5 %, tres décimas por debajo de lo esperado, y un 0.7 % excluyendo autos, en lugar del 0.9 % que se esperaba. Desgraciadamente una gran parte del gasto extra quedó en los surtidores de gasolina, donde ya se paga el galón casi a 3 $. Excluyendo la gasolina, el crecimiento en las ventas queda reducido a un magro 0.1 %.
Aquí ha estado el pistoletazo de salida para una nueva huida del dólar, castigado de nuevo por sus propios datos y dejando claro que no estamos ante un caso de fuerte demanda de las divisas europeas, sino que se trata de simple rechazo al billete verde.
La publicación del dato ha llevado a nuevos máximos en el día para el dólar, y a una nueva ruptura alcista del oro.
La novedad de la sesión de hoy es que el contraste entre la fortaleza de las materias primas y la debilidad de las ventas minoristas en EEUU ha pasado factura a la renta variable que hasta ahora se había estado tomando bien cualquier dato que disminuyese la presión sobre la FED para seguir subiendo tipos. Y es que está claro que la mezcla de bajo crecimiento con inflación no es buena para casi nadie.
En definitiva, nuevos mínimos para el dólar en sus cruces europeos, con el yen prácticamente a punto de hacer los propio. Y mañana…la Balanza Comercial.
Fuente: ACM – Advanced Currency Markets
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