(OroyFinanzas.com) – Esta ha vuelto a ser una semana muy interesante para el oro que ha cogido a muchos analistas por sorpresa a diferencia de a los seguidores del metal que llevaban tiempo anunciando esta subida. El pasado miércoles, el oro subió en dos horas 23 dólares la onza, para cerrar el viernes en 682,90 USD.
De continuar la tendencia alcista el oro se dirige de nuevo a sus últimos máximos de 730$ alcanzados en el mes de mayo del año pasado. No sin antes encontrar quizás cierta resistencia en los 700$. Cinco años de subidas consecutivas en el mercado del oro que confirman que el metal se encuentra en pleno mercado alcista.
Si bien no se puede hacer una proyección a ciencia cierta de donde finalizará este ciclo alcista, existen suficientes factores fundamentales que apoyan que esta subida se sostenga y que hacen muy improbable una caída de los precios a medio plazo.
El aumento del precio se debe, entre otros factores, al desequilibrio entre la oferta y la demanda. También está apuntalado por la debilidad estructural del dólar estadounidense, así como por el creciente interés mostrado por parte de los Bancos Centrales de economías emergentes en diversificar sus reservas monetarias para invertir en otros activos que no sean dólares; entre ellas compras de oro. En paralelo, los Bancos Centrales de las economías occidentales, a diferencia de lo que han estado realizando en los últimos años, están reduciendo drásticamente sus ventas del metal.
Por otro lado, el oro no es una materia prima como las demás. Es un metal cuya cotización se ve afectada por factores macroeconómicos. El valor de las divisas, los tipos de interés, la inflación o acontecimientos geopolíticos son factores que influyen en el precio del oro. Por ello, este valor esta considerado un refugio en épocas de turbulencias financieras.
El oro más que un metal industrial o comercial es un instrumento económico. El oro forma parte de las reservas monetarias de los Bancos Centrales del mundo entero siendo considerado como parte importante de estas. Esto debería ser una buena pista para darnos cuenta de que el oro no es solo un commodity. El oro es sobre todo dinero; la única forma de dinero que no puede ser emitido a voluntad e ilimitadamente por los Bancos Centrales.
Por esta razón, el precio del oro es una especie de barómetro ancestral que nos avisa de manera silenciosa que algo no funciona bien en la economía. Quizás, la subida sostenida del oro que esta semana se ha disparado, esté confirmando lo que algunos expertos ya han vaticinado pero que no todos se atreven a reconocer. Que el patrón dólar se está resquebrajando porque se sostiene sobre una deuda, la de EE.UU. que comienza a ser insostenible. Esto nos puede llevar a una situación inflacionaria donde todos tenemos mucho que perder. El papel dinero más tarde o más temprano acabará devaluado debido a la ingente masa monetaria en circulación.
Sigamos atentos el ciclo alcista del oro porque amigos… habrá que abrocharse los cinturones pues, parece que esto acaba de comenzar.
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