(OroyFinanzas.com) – Merrill Lynch ha revelado que sus clientes con grandes patrimonios están tan alarmados por el estado del sistema financiero internacional y los signos de inestabilidad geopolítica, que están insistiendo en la compra de lingotes de oro, rechazando la compra de productos derivados o “proxies de papel”.
Ambrose Evans-Pritchard se hacía eco, en un articulo publicado el día 7 de enero en “The Telegraph”, de lo que afirmaba Gary Dugan, jefe de inversiones de Merrill Lynch, quien señala que se ha producido un notable cambio entre los propietarios de grandes fortunas.
“La gente está realmente preocupada por lo que pasara en el mundo en 2009. Es sorprendente cómo muchos clientes demandan oro físico, no ETFs”, indicó el jefe de inversiones de Merrill Lynch refiriéndose a los Fondos Cotizados de oro que cotizan en Londres, Nueva York, y en otras bolsas. “Nunca pensé que podría estar recibiendo llamadas de los clientes dicen que quieren una caja de Krugerrands”, se sorprendía Dugan.
Merrill prevé que la cotización del oro alcanzará los 1.150 dólares en junio del 2009
La entidad financiera americana pronostica que el valor del oro será positivo pase lo que pase. Si los peligros de deflación se confirman en el sistema económico, asegura Merrill, el oro será un refugio seguro. En el caso que el masivo estímulo monetario que se esta viendo en todo el mundo haga resurgir la inflación, el oro también se comportara como un activo refugio. “el oro gana de cualquier manera”, confirma el Sr. Dugan.
Dugan agregó que existe el riego que la deflación pueda ser la mayor amenaza en los próximos meses. “Es muy difícil borrar la psicología de la deflación del cerebro humano una vez empiezan a caer los precios, la gente deja de comprar cosas porque piensa que será más barato si espera.”
Resultados muy negativos en la economía norteamericana
Mientras tenían lugar estas declaraciones, se han hecho públicos los últimos resultados económicos de EE.UU. La economía estadounidense destruyó 2,58 millones de puestos de trabajo en 2008.
Esta cifra de destrucción de empleo es la más alta desde 1945, cuando se perdieron 2,75 millones de puestos de trabajo. Barack Obama, admitió el pasado jueves 8 de enero, que la recesión económica podría “durar años”. Obama afirmó que el desempleo podría alcanzar cifras de dos dígitos si no se adoptaban fuertes medidas. Estas medidas incluirían un paquete de estímulos económicos por parte del gobierno cuyo coste será “considerable, aunque necesario” para detener el círculo vicioso en el que se encuentra la economía.
¿Inflación segura?
Si esto sucediera, si el gobierno de Estados Unidos interviniera masivamente, nos encontraríamos en un escenario claramente propicio para una inflación galopante. Esta situación multiplicaría aún más la creciente desconfianza de los inversores que buscarían valores refugio donde resguardar su patrimonio.
La inversión en oro parece que de una manera lenta pero segura vuelve del ostracismo al que había sido enviada durante casi 40 años.
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