(OroyFinanzas.com) – Algunos de los bancos y sociedades de valores más grandes del mundo están construyendo bóvedas de seguridad para guardar monedas y lingotes de oro valorados en decenas de miles de millones de dólares. De esta manera, aprovechan la creciente demanda y los precios récord.
A raíz del creciente interés que muestran los inversores en el metal precioso –debido a la preocupación por la economía global y la crisis de deuda soberana europea–, ha comenzado a haber escasez de espacio para almacenar lingotes a largo plazo.
El precio del oro cada vez más alto se traduce en mayores cargos por custodia, porque normalmente representan un porcentaje del precio del metal. El oro la semana pasada llegó a valer un récord nominal de 1.251$ la onza troy, un aumento de 14% comparado con enero.
“Se busca más que nunca el oro físico y eso está provocado todo tipo de tensiones”, dijo Peter Hambro, presidente de la minera Petropavlovsk..
Gran parte de la demanda proviene de los fondos cotizados respaldados por oro. Las tenencias del más grande del mundo, el SPDR Gold Trust, el pasado viernes ascendían a un récord de 42 millones de onzas de oro con un valor aproximado de 51.500 millones de dólares.
Si bien algunos bancos señalaron que contaban con espacio disponible, otros admitieron que sus bóvedas están casi completas. Varias entidades informaron que estaban construyendo o planeaban construir nuevas cámaras. JP Morgan hace poco inauguró una nueva bóveda en Singapur y Via Mat International, la compañía suiza de valores, acaba de estrenar un depósito seguro para custodia de plata en el oeste de Londres. Deutsche Bank está analizando contar con un nuevo depósito.
Frank Ziegler, responsable de metales precioso en BayernLB, en Alemania, aseguró que sus espacios están completos. “Estamos estudiando la posibilidad de ampliarlos. Estamos sólo en la fase de planificación,” dijo.
Roger Jones, director global de commodities en Barclays Capital en Londres, contó que el banco está “siguiendo activamente en negocio de la custodia de metales preciosos”.
Si bien la imagen tradicional de una bóveda de banco es la de un sótano bajo tierra, las más modernas son depósitos construidos para varios propósitos, sobre el nivel del terreno y rodeados de alta seguridad.
La tendencia de construir bóvedas nuevas es contraria al desmantelamiento a principios de los ‘90 de la compleja y costosa infraestructura que se utilizaba para las cámaras durante el último auge del oro a fines de los ‘70.
Philip Klapwijk de GFMS, la consultora de metales preciosos, señaló que el hecho de que se estén construyendo bóvedas refleja la “nueva naturaleza” del mercado del oro.
Los inversores que esperan beneficiarse con el alza de los precios del metal precioso, y que son los que están aumentando la demanda, quieren guardarlo durante un tiempo prolongado.
Javier Blas
Fuente: Cronista
© OroyFinanzas.com