(OroyFinanzas.com) – Sabemos cuánto nos cuesta el alquiler de la casa, o el pago de la hipoteca. Sabemos cuánto nos cuesta la factura telefónica, la eléctrica o la del supermercado. Y hasta sabemos también con bastante precisión cuánto pagamos en gastos menores, tales como tomar un café, comprar el periódico o ir al cine. Sin embargo, ¿sabe usted cuánto paga en impuestos?¿Sabía usted que los impuestos son el mayor gasto que paga al año?
Por estar camuflados y por costumbre, el contribuyente los acepta dócilmente y sin rechistar. Sin embargo, si se hace un número rápido, se comprueba que los impuestos directos e indirectos se llevan una parte muy, muy importante de nuestra renta. ¿Cuánto?
El Día de la Liberación Fiscal
Se ha inventado un sencillo concepto para ilustrar la carga fiscal que soportamos: el Día de la Liberación Fiscal. Cada año pagamos una cantidad determinada de dinero en impuestos. Imaginemos que dedicamos a pagar estos impuestos todos lo que ganamos el 1 de enero. Y el 2 de enero. Y el 3. Y el 4. … Y así hasta que pagásemos todo los impuestos de ese año. ¿Qué día quedaríamos libres de pagar impuestos, por haber pagado ya todo lo del año?
A ese día se le llama el Día de la Liberación Fiscal [1] (Tax Freedom Day). Si consultan los datos relativos a países, verán que el ciudadano está trabajando hasta el mes de mayo, junio o julio para el Estado, no para sí mismo. Todo el dinero que gana hasta ese día se lo lleva el ministerio de Hacienda. Por lo que todo ese dinero se gasta en lo que quiere el Gobierno, no en lo que quiere quien lo ha ganado con su esfuerzo.
Se puede calcular aproximadamente lo pagado en impuestos sumando las retenciones de las nóminas y el IVA de los gastos. Sin embargo, existen aplicaciones y paginas web que permiten a cada uno calcular el pago anual en impuesos de manera automática y personalizada. Le animamos a que lo pruebe. [2]
Paraísos fiscales
Existen algunos países donde la tributación es sensiblemente más baja que en el resto, porque así lo han decidido sus gobiernos. Esos países se denominan coloquialmente “paraísos fiscales”. La consideración de paraíso fiscal es por tanto algo subjetiva (¿a partir de qué cantidad se consideran impuestos bajos?). Por ese motivo, la lista de países considerados paraísos fiscales depende de una legislación a otra.
En contra de lo que se piensa y publica en los medios, tener dinero en un paraíso fiscal no es un delito en absoluto. La confusión viene de que es frecuente que dineros obtenidos ilegalmente se lleven a estos países. Sin embargo, por ejemplo, para residentes españoles es perfectamente legal tener una cuenta “offshore” en el extanjero, ya sea paraíso fiscal o no. Desde este año el gobierno de España obliga a comunicarlo al Banco de España si la cantidad es de más de 50.000 euros [3], para lo que el Banco pone a disposición del ciudadano los impresos DD1 y DD2.
Residencia fiscal
Pero según la legislación actual, uno tributa en donde vive por todas las rentas obtenidas. Por ese motivo, alguien que resida en España tiene que declarar los ingresos y pagar los tipos impositivos españoles, independientemente de dónde se hayan generado las rentas (y de la nacionalidad del contribuyente). Por ese motivo, no sirve de gran cosa llevar el dinero a “paraísos fiscales”, ya que la tributación sobre ese dinero y sus rentas sigue siendo la misma que si se quedase en España.
Desgraciadamente, la única alternativa legal al “infierno fiscal” actual es irse a residir a otro país [4] que tenga impuestos menores.
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