(OroyFinanzas.com) – La reciente caída de la cotización del oro hasta los 1.576 dólares por onza, su nivel mas bajo en 7 meses, constituye una caída del 5% con respecto a inicios de año, frente a una ganancia del 8,7% en 2012.
Como bien subrayaba esta semana el prestigioso analista Adam Hamilton de Zeal Intelligence, la cotización del oro esta semana fue abatida en lo que se podría describir como una capitulación y los bajistas del oro se mostraron eufóricos saliendo en tropel a pronunciar la condena del metal. “Pero las capitulaciones son realmente eventos muy alcistas”, asegura Hamilton.
El bajo volumen del oro y su caida en cascada esta semana fue puramente emocional. Los fundamentales alcistas del oro no han variado desde el verano de 2011, cuando se alcanzaron máximos nominales de 1.900 dólares la onza. “El que se sienta amedrentado por esta corrección, probablemente se pierda las ganancias futuras”, indicaba el experto.
Los analistas apuntan a que el entorno económico mundial está mejorando
Los mercados no se ponen de acuerdo sobre las perspectivas a corto plazo para el precio del oro, una gran mayoría de inversores y analistas se apoyan en la disminución del precio del metal para ‘confirmar’ que el entorno económico mundial está mejorando y que por ello el oro está perdiendo su brillo como protección.
José Luis Martínez Campuzano, Estratega de Citigroup en España señalaba recientemente en Cinco Días que “los mercados están adelantando un mejor panorama económico, lo que es incompatible con la inversión refugio en metales preciosos. Estos activos se benefician de la aversión al riesgo, de la crisis y de las expectativas de inflación” y añadía que “en estos momentos la aversión al riesgo está bajo mínimos de cinco años, la volatilidad también y la inflación está lejos de ser un problema”.
Para Soledad Pellón, estratega de Mercados de IG Markets, el oro tuvo su auge durante los momentos más tensos de la crisis, pero “ya no hay tanto miedo y los inversores no quieren guardar valor, sino buscar rentabilidad”.
Mientras que gran parte de los analistas de mercado ven tanto una mejora de la economía estadounidense, como una reducción en la deuda soberana en Europa, una mejora de los problemas del mercado interno de la vivienda y algunos signos de progreso procedentes de Washington, la realidad es que se trata de buenos deseos, pero no de hechos respaldados por una realidad.
El oro un barómetro de la inestabilidad económica
La cotización del oro por norma general se ve impulsada por el riesgo financiero, el precio del oro es un barómetro de la inestabilidad económica y de momento el riesgo continúa siendo muy alto. Todo parece apuntar a un aumento de las tasas de desempleo en EEUU y a una continuación de los programas de flexibilización cuantitativa [1].
Desde que colapsó la economía en Estados Unidos en 2008, el gobierno y la Reserva Federal han tomado medidas para hacer crecer la economía y evitar una crisis casi inevitable, pero la economía no mejora y la situación sólo se ha agravado.
La volatilidad es parte de cualquier mercado alcista, y los metales preciosos no son una excepción. En 2006 y 2008, los precios del oro corrijieron un 23% y 30%, respectivamente y son muchos los inversores que perciben estas correcciones en el precio del oro como una buena oportunidad de compra. El precio del oro ha corregido, pero el mercado alcista está intacto.
El oro es algo más que una cobertura contra la inflación, es la única moneda que no pueden ser manipulada por los bancos centrales
La inflación se puede apreciar en la alimentación, en el precio de la energía, etc. y a medida que la Reserva Federal continúe inyectando mensualmente miles de millones de dólares en la economía, las consecuencias de estas políticas serán visibles y evidentemente están directamente relacionadas con las acciones de la política monetaria del banco central estadounidense.
El oro es algo más que una cobertura contra la inflación, es la única moneda que no puede ser manipulada por los bancos centrales. Todas las razones por las que la gente piensa que estamos volviendo a la normalidad y que el oro ya no es válido como protección, son las mismas razones que todavía nos preocupan. Todo apunta a que al mercado alcista del oro se encuentra lejos de haber teminado.
La economía de EEUU se encuentra en un callejón sin salida
En el proceso de tratar de recuperar el sistema financiero, rescatando a una serie de industrias y alentando a los consumidores a gastar mas, EEUU ha entrado en un bucle de deuda, déficit, inflación y quiebra.
Una gran cantidad de políticos, economistas y expertos de tendencia keynesiana reclaman la aplicación mayores estímulos económicos, una mayor flexibilización cuantitativa, un gasto mayor y más impuestos para salir de la crisis. En este punto es importante recordar la definición de locura que hizo Einstein: “Locura es hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes.”
Suministrar dinero barato a los peces gordos de Wall Street obviamente va a crear un caos. Peter Schiff, presidente de Euro Pacific Capital, señaló en una ocasión: “Si una maestra de kindergarten le da a sus estudiantes chucherias y refrescos, se va de la clase y cuando regresa se encuentra a todos sus alumnos peleando, montando un lío y actuando como locos, a quien se debe responsabilizar? ¿a los niños o a la maestra?”
Sería bueno mantener en el punto de mira que para diversificar sus reservas de divisas fuera del dólar y del euro, los bancos centrales de países emergentes como China, Rusia etc., durante 2012 han comprado más oro que en cualquier año desde 1964.
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