(OroyFinanzas.com) – El asteroide conocido como 2012 DA14 que rozó la Tierra el pasado 15 de febrero 2013 a 13 km por segundo, cuenta en su interior con recursos que lo convierten en una “mina de oro” que ha sido valorada en miles de millones de dólares. El asteroide tenía un diámetro de entre 40 y 50 metros y un peso de 130.000 toneladas.
El asteroide 2012 DA14 ‘rozó’ la tierra por debajo del cinturón de satélites y fue detectado el pasado mes de diciembre desde el observatorio robótico, granadino de Collados de La Sagra, propiedad del grupo Collados y conectado con el Observatorio Astronómico de Mallorca. El asteroide siguió la trayectoria pronosticada y pasó a las 20.25 horas del pasado día 15 febrero a una distancia de 28.164 kilómetros de la Tierra y a una velocidad de 13 km por segundo y no volverá a aproximarse a nuestro planeta hasta el 15 de febrero del año 2046.
Los recursos que albergan en su interior los asteroides los convierten en “minas de oro” valoradas en miles de millones de dólares. La compañía estadounidense Deep Space Industries (DSI), ha calculado que el asteroide detectado más cercano que jamás ha ‘rozado’ nuestro planeta contiene 48.000 millones de euros en agua recuperable y 97.700 millones de euros en metales.
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“Estas cifras podrían despertar una “nueva fiebre del oro” en un futuro no muy lejano”, aseguró Stephen Covey, fundador de Deep Space Industries en una entrevista con la agencia de noticias Efe.
El coste sería elevado y la tecnología para conseguirlo complicada pero las posibilidades de estas rocas gigantes, compuestas de agua y metales como hierro, oro y platino, son enormes. DSI propone explotar estos asteroides en el espacio arrastrándolos a la órbita baja terrestre, ya que en un momento en el que la NASA se plantea hacer viajes tripulados más largos, serían como un “oasis” para repostar. Su objetivo es convertir el material del asteroide en componentes metálicos y utilizar el agua recolectada en forma de hielo para combustible de cohetes. Todo ello en un plazo de una década.
Sin embargo, en concreto el asteroide 2012 DA14 no hubiese sido un buen objetivo ya que su órbita está relativamente inclinada de la Tierra, por lo que se necesitaría un enorme despliegue energético para “cazarlo”.
Estos cuerpos celestes son considerados los restos que quedaron después de la formación del Sistema Solar y albergan “todo lo que nuestra civilización necesita para expandirse en el espacio y para proveer nuestras necesidades y aumentar la riqueza de nuestra economía”, según Covey.
Los científicos de la NASA indican que nada tuvo que ver el meteorito caído en Rusia recientemente con el asteroide, ya que la trayectoria del meteorito que cayó en Rusia era significativamente diferente a la trayectoria del asteroide 2012 DA14, lo que supone que se trata de objetos que no tienen ninguna relación. “Si el meteorito hubiera tenido que ver con el asteroide, hubiera presentado otra dirección de vuelo, hubiera volado de Sur a Norte y no de este a Oeste, como fue el caso”.
Fuente: elpais.com [1], opinion.com, ABC [2], cronica.com.mx [3]
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