(OroyFinanzas.com) – La Unión Europea cuenta con su propia agencia de inteligencia. El servicio secreto de inteligencia de la Unión Europea, emplea a 1.300 personas y le cuesta a los contribuyentes 230 millones de euros al año. Ahora al Parlamento Europeo le ha empezado a preocupar esta institución, porque no existe un control verdaderamente eficaz sobre ella y la transparencia no es precisamente la característica principal de las agencias de inteligencia.
Martin Ehrenhauser eurodiputado austríaco y jefe del servicio de seguridad belga señala en su blog, “Podemos afirmar con seguridad que Bruselas es una de las mayores capitales de espionaje del mundo”. Alain Winants, director de los servicios de inteligencia de Bélgica supone que puede haber varios cientos de espías pueden estar en Bruselas.
Martin Ehrenhauser señala que un total de seis unidades componen lo que se considera el servicio de inteligencia europeo, la European Intelligence Community.
Además de Europol y Frontex existen cuatro unidades de servicio de informacion, que son el Intelligence Analysis Center, el Satellite Center, el Intelligence Directorate y el Situation Room, dependientes todos ellos del European AIS Database.
230 millones anuales reciben las seis unidades de inteligencia de la UE con cargo a los presupuestos de la UE. Estos presupuestos “han aumentado constantemente en los últimos años, “, afirma Ehrenhauser. “Con 1.300 personas trabajando, la UE tiene un servicio de inteligencia del tamaño del “servicio secreto de país como Austria”.
El problema es que el Parlamento de la UE no tiene autoridad sobre las diferentes unidades del servicio secreto y Martin Ehrenhauser considera que el control democrático parlamentario, a través del Parlamento es urgente y necesario.
En Europol y Frontex el control parlamentario es “relativamente estable”, pero en las cuatro unidades de inteligencia restantes, ese control no se da. Existe una especie de control presupuestario, pero con respecto al personal o al uso exacto de los fondos comunitarios el Parlamento no puede participar, asegura Martin Ehrenhauser. Curiosamente una iniciativa del Parlamento para un mejor control parlamentario, sin embargo, fue rechazada recientemente.
Sobre la eficacia de la agencia de inteligencia de la Unión Europea, según Ehrenhauser prevalecen, sin embargo, grandes diferencias de opinión. Para algunos se trata sólo de burocracia que engulle dinero público. Otros, sin embargo, elogian la profesionalidad de las seis unidades.
Según Ehrenhauser se analizan diferentes fuentes de información y se hacen llegar a las autoridades de los países correspondientes, y lo mismo hacen los respectivos países que manda a Bruselas la información requerida.
Pero los respectivos servicios secretos de los países no están obligados a compartir información, se ha intentado pero no ha habido mayoría para aprobar esto.
El eurodiputado austriaco Strasser propuso una especie de CIA en Europa, pero este diputado no va a poder llevar adelante su propuesta porque ha sido encarcelado por corrupción.
Fuente: Deutsche Wirtschafts Nachrichten.de
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