(OroyFinanzas.com) – El fundador y consejero delegado del fondo de inversión Dundee Comp. Ned Gooman ha acabado con el último reducto de acciones de bancos que quedaban en su patrimonio, dirigiendo estas inversiones hacia el oro.
El patrimonio de Goodman asciende a 10.000 millones de dólares canadienses (unos 9.600 millones de dólares USA), el cual está invertido en compañías energéticas, inmobiliario, metales preciosos e infraestructuras. Hasta el pasado mes de julio, Goodman poseía un porcentaje de control en el banco canadiense Scotia cuyo valor de mercado era de 519 millones de dólares canadienses a fecha de 31 de marzo.
Los objetivos de Goodman rezuman una clarividencia poco dada entre los grandes inversores, tal como se muestra en estas declaraciones a Bloomberg el pasado 1 de agosto: “Nuestro modo de actuación en la totalidad de las inversiones es estar presente en aquellas industrias y compañías que tomarán ventaja ante un proceso inflacionario. En este momento, soy muy optimista con el oro más que nunca”.
El fundador en 1962 de la actual Brookfield Asset Management ha hecho una apuesta clara y decidida por el oro de inversión. La continua expansión monetaria [1] acabará, más tarde o más temprano, en un proceso inflacionario a gran escala y la rápida pérdida de valor del dinero. Como bien dice Goodman, es simplemente cuestión de tiempo. Una nación como Estados Unidos no podrá aguantar, por más tiempo, la continua impresión de dinero.
En este momento, la inflación [2] no está presente de forma generalizada. La inflación, medida erróneamente por el IPC, apenas supera el 2% anual. Sin embargo, ciertos productos alimentarios y los servicios financieros poseen una clara tendencia inflacionista declarada desde hace tres años. No en vano, la parte que aflora a la economía real de las inyecciones de liquidez mensuales de la Fed y el BoJ se dirige hacia los sectores más dependientes del crédito y con una gran capacidad de absorción de liquidez. En otros tiempos fue el sector inmobiliario y en este momento son otros sectores.
La política de Goodman de gestionar los riesgos sistémicos e inflacionarios está generando notables resultados. La capitalización bursátil (el valor en Bolsa) de la gestora Dundee alcanza los 1.190 millones de dólares canadienses. Esta compañía domiciliada en Toronto cotiza en las Bolsas de Toronto y en el índice compuesto Standard&Poor’s/TSX americano. En los últimos cinco años, la compañía ha generado una rentabilidad acumulada del 165%, muy por encima del retorno de las inversiones de su admirado Warren Buffet (no exceden del 52%).
Goodman, por último, destaca en otros campos como el inmobiliario y el campo, en especial el ganado ovino (oveja, cabra y cordero). Es propietario de un 83% de las acciones de la compañía Blue Goose Capital Corp. la cual se dedica a la cría ovina y el cultivo de semillas, además de poseer piscifactorías y amarres pesqueros. Blue Goos es uno de los más importantes productores de carne en Norteamérica, con más de 13.000 cabezas de ganado.
Por el lado inmobiliario, Goodman posee una filial de “real estate” y varias subsidiarias como la Corporación Inversora Inmobiliaria e Industrial Dundee, la cual compró en Toronto la torre que acoge la sede del Scotia Bank por 1.300 millones de dólares canadienses.
Fuente: Financial Post –Business [3]
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