(OroyFinanzas.com) – El primer ministro de China, Li Keqiang, está haciendo un “road show” por Europa. Su primera parada ha sido Reino Unido, en la cual se han producido varios acontecimientos importantes como la firma de dos contratos de gas natural licuado de 1,5 millones de toneladas que serán provistas por las compañías British Petroleum y Shell a China durante los próximos veinte años. Aparte de esto, otra de las intenciones del gobierno chino es la internacionalización del renminbi o yuan, la divisa local, y parece que lo está consiguiendo.
Desde hace dos meses, en Londres funciona un mercado de contratación y liquidación en yuanes. La plaza de Londres es el centro mundial del mercado Forex de divisas y, por tanto, un mercado estratégico para China. El interés de los bancos como el Banco de Construcción o el Banco Comercial e Industrial es extender sus mercados y el ahorro de costes de transacción. El establecimiento de contratación en yuanes en Londres ahorra importantes costes de transacción y produce un desplazamiento del mercado hacia el yuan, mientras China sigue deshaciendo posiciones en dólares.
Respecto al gas, el acuerdo firmado entre Shell y la compañía china China National Offshore Oil Corporation va más allá de la exportación de 1,5 millones de toneladas como señalaba anteriormente. Además de este acuerdo, las dos compañías han firmado la participación en tres proyectos de explotación de yacimientos de gas pizarra o “shale gas” en el Mar de China, el cual sigue en disputa con Vietnam. En estos proyectos participará el gigante nacional PetroChina.
No sólo la visita de Keqiang a Londres ha generado frutos en el mercado energético. En plena discusión sobre el futuro del mercado de metales preciosos de Londres, China quiere aumentar su participación en este mercado. Lo hará mediante la entrada de bancos y operadores controlados por capital chino, para diseñar un nuevo mercado en el cual se determine el precio de forma contínua mediante mecanismos de subasta y precio de referencia adoptando la operativa de, por ejemplo, las bolsas de valores.
En este sentido, la expansión china está a pleno rendimiento. En el día de hoy, Li Keqiang visita Grecia para revisar las inversiones chinas en el país heleno y anunciará la entrada en otras empresas relevantes como son el aeropuerto de Atenas o el puerto del Pireo, el cual adquirió en 2011. En otros países como España, el capital chino ha entrado en diversos negocios, muchos de ellos relacionados con el sector inmobiliario, donde prima la búsqueda de “gangas”.
Por si todo esto fuera poco, la expansión china está llegando también al transporte de mercancías. Con un ejercicio de cierto proteccionismo, el gobierno chino ha desautorizado la unión de tres gigantes del tráfico de contenedores en los puertos marítimos del mundo [1]: la danesa Maersk (la cual controla el puerto de Algeciras en España), la suiza MSC (mayoritaria en el puerto de Valencia) y la francesa CMA-CGM. El acuerdo, aprobado por las autoridades de la competencia de Europa y Estados Unidos, no ha pasado el examen de los reguladores chinos por entender que va en contra de la competencia.
Fuente: The Wall Street Journal [2]
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