(OroyFinanzas.com) – La crisis económica de Europa está erosionando los sistemas políticos de muchos países. Nuevos actores están surgiendo y amenazando la supremacía de los actores tradicionales. Alianzas y eventos que parecían imposibles hace solo unos pocos años,ahora se están discutiendo abiertamente en toda Europa. El 3 de diciembre, por ejemplo, Suecia anunció que llevaría a cabo elecciones anticipadas, en parte por el auge de movimientos políticos de la extrema derecha. En España, el partido de centroderecha gobernante, Partido Popular, está discutiendo abiertamente la posibilidad de entrar en una alianza con sus tradicionales rivales de centro-izquierda, PSOE, para prevenir que PODEMOS, un partido de protesta y reforma, pueda asumir el control. Los miembros claves de la Unión Europea, entre ellos Suecia, España, Reino Unido y posiblemente Grecia, tendrán elecciones en 2015. En la mayoría de los casos, estos países verán resultados que nadie hubiera creído posibles en 2008.
Elecciones de Suecia en 2015
El primer ministro sueco, Stefan Löfven, anunció elecciones anticipadas después de que su gobierno de centro-izquierda perdiera una votación del presupuesto a menos de tres meses de su llegada al poder. El anuncio de Löfven se precipitó por una decisión del partido de extrema derecha, Demócratas de Suecia, que apoyó a la oposición durante una votación del presupuesto. Las elecciones anticipadas de Suecia, las primeras para el país en casi 60 años, se llevarán a cabo el 22 de marzo 2015 con el partido anti-inmigración, Demócratas de Suecia, jugando probablemente un papel central. En las elecciones parlamentarias de Suecia en septiembre, ninguna coalición logró formar un gobierno de mayorías, pero las elecciones estuvieron marcadas por los buenos resultados del partido de extrema derecha, que recibió el 12,9 por ciento de los votos, frente al 5,7 por ciento en el 2010, cuando entró en parlamento por primera vez.
Mientras que Suecia es una de las economías de más rápido crecimiento en Europa, el desempleo se mantiene por encima de los niveles previos a la crisis. Más importante, Suecia tiene el mayor número de solicitudes de asilo por habitante en la Unión Europea. El año pasado, los violentos disturbios sacudieron los suburbios de inmigrantes en Estocolmo, revelando el reto de Suecia para integrar a sus inmigrantes en la sociedad. Las encuestas de opinión muestran que los suecos siguen apoyando en gran medida la idea de vivir en un país abierto a los solicitantes de asilo, pero también están preocupados por el impacto económico y cultural de la creciente inmigración. Si los Demócratas de Suecia mantienen su lugar como el tercer partido más grande del país, es probable que se convierta en la clave para la formación de un nuevo gobierno. Esto pondría a un partido de extrema derecha en una posición de poder en una de las principales economías de Europa.
Elecciones de España en 2015
Las elecciones generales de España, que se celebrarán a finales del 2015, es probable que tengan un impacto aún mayor en su sistema político. Soportando la crisis económica del país y una serie de escándalos de corrupción que involucran al partido gobernante (Partido Popular) y al de la oposición (PSOE), han llevado a un aumento dramático en el apoyo popular a Podemos, un partido de protesta de izquierdas que quiere renegociar los objetivos de deuda y déficit de la Unión Europea y la reestructuración de la deuda española. Podemos fue creado hace menos de un año, pero recientes encuestas de opinión ponen su popularidad en torno al 28 por ciento, por encima de la de la corriente principal de centro-derecha del Partido Popular español y el partido de los Trabajadores Socialista de centro-izquierda, PSOE. El aumento de Podemos en España ha sido tan rotundo que el 2 de diciembre, la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, llegó a afirmar “que su partido podría considerar una alianza con el PSOE con el fin de formar un gobierno”.
El PSOE rechazó la idea, mientras que los miembros del Partido Popular se retractaron el 3 de diciembre. Sin embargo, las declaraciones de Cospedal destacan la magnitud de la amenaza para el sistema de los dos partidos de España, que fueron creados después del final de la dictadura de Franco, a finales de 1970. Antes de la crisis, estos dos principales partidos políticos de España captaban normalmente entre el 70 y el 80 por ciento de los votos. Las elecciones del 2015 probablemente marquen la primera vez en la historia moderna española que su apoyo combinado cae por debajo del 50 por ciento. La situación es especialmente difícil para el PSOE, que recientemente se movió un poco más a la izquierda para atraer a algunos de los votantes de Podemos. El partido aún tiene que decidir si quiere arriesgarse a perder a los votantes que estén más a la izquierda, al aliarse con el Partido Popular, o arriesgarse a perder a los votantes moderados, por ponerse del lado de Podemos.
Elecciones de Grecia en 2015
Grecia ofrece un ejemplo de lo que la política española podría ser en el futuro. Al igual que España, Grecia tenía un sistema bipartidista relativamente estable donde se alternaban en el poder la centro-derecha y la centro-izquierda. Pero la crisis económica llevó al rápido aumento del partido de izquierda Syriza, que se opone a las medidas de austeridad de la Unión Europea. En 2012, se necesitaron dos elecciones para que los principales partidos formaran una alianza y lograran mantener a raya a Syriza. En Grecia, donde las rivalidades políticas son antiguas y profundas, tal alianza habría parecido imposible antes de la crisis. Grecia probablemente volverá a ser noticia sobre la crisis europea el próximo año cuando el Parlamento griego intente elegir a un nuevo presidente. Si el Parlamento fracasa, se verá obligado a convocar a elecciones anticipadas. Con Syriza aún en la cima de las encuestas de opinión, sería más difícil separarles del poder esta vez. Syriza ha prometido reestructurar la deuda de Grecia, un movimiento que probablemente haría que los mercados financieros se pongan nerviosos y genere incertidumbre en toda la zona del euro, en un momento en que Europa pensaba que había encontrado cierta estabilidad. Cuando el Banco Central Europeo se comprometió a intervenir en los mercados financieros hace casi dos años, la Unión Europea perdió el sentido de urgencia que tuvo en las primeras etapas de la crisis. Los europeos tendrán que volver a la mesa de negociaciones y discutir todos los asuntos que hasta ahora han sido evitados.
Elecciones del Reino Unido en 2015
Por último, el euroescepticismo también será un jugador clave en el Reino Unido, que celebrará elecciones en mayo 2015. Gran Bretaña también tenía un sistema bipartidista en funcionamiento antes de la crisis, por lo que las coaliciones eran algo relativamente poco común. Pero el ascenso de la lucha contra la inmigración con el partido UKIP está amenazando seriamente este sistema. Una coalición entre el Partido Conservador y el Partido Laborista o un acuerdo entre los tories y UKIP parece imposible por ahora, pero tampoco sería concebible si ninguna de las partes gana escaños suficientes para gobernar por su cuenta.
La situación política actual en Europa habría parecido imposible hace sólo cinco o seis años. La mayoría de las personas no habrían creído que el desempleo en España o Grecia podría estar por encima del 25 por ciento o que los partidos euroescépticos se convertirían en actores claves en la política europea. Más importante, la mayoría de los europeos nunca habría pensado que la supervivencia de la Unión Europea estaría bajo una amenaza tan grave. Para muchos españoles, griegos, suecos y británicos, la transformación de sus sistemas políticos puede parecer todavía poco probable, pero es una sorpresa probable para el próximo año.
LFE
Fuente: Stratfor [1]
© OroyFinanzas.com