La escritora Begoña Huertas señala en su artículo “De pronto, el desconcierto” la importancia de plantearse cuestiones como: ¿qué es el dinero? ¿quién impone las reglas? ¿a qué llamamos democracia? o si todo desarrollo representa progreso.
Se hunden las bolsas, la renta fija y las materias primas, mientras que el oro actua como valor refugio.
El CEO de Goldcorp Chuck Jeannes sube su pronóstico del precio del oro a 1.700$ por onza troy para finales de 2011. La creciente demanda en Asia y la crisis
Se acerca la fecha límite para aprobar un incremento del techo de deuda en USA y no hay acuerdo a la vista. El precio del oro sube con fuerza.
El patrón oro sí servía como sistema que preservaba el poder de compra del dinero, mientras que las reglas inflacionistas actuales, en el mejor de los casos, consiguen una tasa reducida de inflación pero con el coste de seguir sobre-emitiendo liquidez en la economía, deteriorando el valor de la moneda a medio y largo plazo.
Los analistas revisan al alza sus previsiones para el precio del oro y de la plata, comienzan a prestarle un poco más de atención.
Según el Consejo Mundial del Oro, en el primer semestre de 2011 los bancos centrales ya han comprado más oro que en todo el 2010. Estas compras netas de oro apoyan el precio del oro.
Bernanke ha convertido a la Reserva Federal en un estercolero de última instancia, ha comprometido la liquidez de la Fed durante bastantes décadas para no lograr ningún efecto apreciable salvo retrasar la recuperación. Cuando la demanda de crédito reflote, el dólar puede ir preparándose para una importante inflación.
El oro y el euro renuevan su escalada tras el toque de atención de Moody’s a EEUU. Ante tal tensión en los mercados bursátiles y de deuda, los inversores han buscado refugio en el oro. El metal precioso por excelencia marcó ayer un nuevo récord histórico en 1,585 dólares la onza.
Bernanke negó ante el ‘Comité de la Cámara de Servicios Financieros de EEUU’, que el oro fuera dinero y afirmó que los bancos centrales guardan oro en sus reservas porque se trata de una vieja tradición.
Juan Castañeda explica la necesidad de limitar la expansión monetaria y los peligros de permitirle discreción a los banqueros centrales.
Entre 2008 y 2010 los bancos centrales internacionales aumentaron sus reservas de oro en un 2,2%. Aumentaron sobre todo las compras netas de los países BRIC.
Decía Adam Smith en La Riqueza de las Naciones, que no hay mayor impertinencia y, por lo tanto, presunción, en reyes y ministros, que pretender velar por la economía de las personas privadas para limitar sus gastos ya que ellos mismos, reyes y ministros, son siempre y sin excepción alguna, los más grandes derrochadores en la sociedad.
