James Turk señaló durante el World Gold Investment Congress 2010 celebrado la semana pasada en Londres, que basándose en simples cálculos matemáticos, no ve razón alguna por la cual el oro no podría alcanzar los 8,000 dólares la onza al finalizar este ciclo alcista.
James Turk, presidente de Goldmoney, y prestigioso analista de oro y plata, señaló que habria que permitir que los bancos mal gestionados quiebren.
Que la base del oro pase a backwardation y además permanezca en esa situación supone una anomalía grave. Y se debe a que el mercado está anticipando un desabastecimiento en algún momento futuro en su suministro o simplemente que el oro ya no va a estar disponible a ningún precio.
Las dudas que acechan de nuevo a las emisiones de deuda periférica de Europa y la incertidumbre bursátil han incitado a los inversores hacia la compra de oro. El valor refugio alcanzó ayer los 1.262 dólares por onza, su máximo histórico.
Brillantes economistas y analistas financieros sostienen que el precio del oro se encuentra en una peligrosa “burbuja”. Para evaluar si estamos realmente dentro de una burbuja lista para explotar, pensemos si la crisis mundial se ha terminado o no.
En la situación actual de gran incertidumbre, los inversores se han enfocado en invertir en metales preciosos como el oro y en bonos del gobierno de EE.UU.
Según Morningstar.com, los fondos de inversión especializados en oro han tenido rentabilidades de hasta 12%.
Si quiere tomar la temperatura al mercado mundial, siga el precio de los metales preciosos. Su precio no es reactivo sino anticipativo porque en su compra y venta intervienen cientos de miles de agentes que disponen de mucha y variada información.
Los metales preciosos, aparte de su capacidad de resguardar valor de la furia inflacionista alimentada por los Gobiernos y sus imperiosas necesidades de gasto, tienen más utilidades, lo que les hace subir o bajar dependiendo de la demanda de esos productos finales en los que el oro, la plata, el paladio o el platino son componentes esenciales.
El precio del oro se desplomaba ayer más de 40 dólares en dos horas, la mayor caída desde diciembre 2008. el dólar se fortalecía frente a las principales divisas, al tiempo que el euro caía a mínimos de siete meses frente a la moneda estadounidense, por los problemas de la deuda soberana de Portugal, Grecia y España.
El euro marcaba mínimos de siete meses frente al dólar el jueves, golpeado por temores sobre la salud fiscal de algunos países de la zona euro, avivados tras las declaraciones del presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, que aseguró que habría grandes desequilibrios fiscales.
El precio del oro experimentó el miércoles su mayor caída en un mes en el ‘Commodity Exchange’ de Nueva York, debido a las preocupaciones sobre las restricciones al crédito en China, que impulsan al dólar y disminuyen el apetito por el riesgo por parte de los inversores.
La cotización del oro ha pasado de 700 dólares la onza a finales de 2008 a cotizar aproximadamente en 1.130 en la actualidad. Algunos vaticinan que el oro se dirije a 2.000 dólares la onza, en un futuro próximo, otros se atreven a predecir los 5.000 la onza.
“La plata y oro están siendo impulsados principalmente por la demanda de inversión, y por eso reaccionan con mayor sensibilidad a los cambios en el dólar “, señalo Stefan Graber, analista de Credit Suisse Group AG, en un informe.
